
Un minuto apenas para escuchar el canto de los pájaros, un minuto sirve para oír el silencio, o comenzar una canción, es en un minuto en que uno dice el "sí" o el "no" que cambiará toda su vida, un minuto para un apretón de mano y conquistar un nuevo amigo, un minuto para sentir la responsabilidad pesar en los hombros, la tristeza de la derrota, la amargura de la incertidumbre, el hielo de la soledad, la ansiedad de la espera, la marca de la decepción, la alegría de la victoria, en un minuto se puede amar, buscar, compartir, perdonar, esperar, creer, vencer y ser.
En un simple minuto se puede salvar una vida, tan sólo un minuto para incentivar a alguien o desanimarlo, un minuto para comenzar la reconstrucción de un hogar o de una vida, basta un minuto de atención para hacer feliz a un hijo... un padre, un amigo, un alumno, un profesor, un semejante... Sólo un minuto para entender que la eternidad está hecha de minutos.
De todos los minutos bien vividos... un minuto... Cuántas veces los dejamos pasar sin

Un minuto... parece increíble... parece tan poquito y sin embargo puede dejar una huella tan profunda en nuestra vida, lo importante es no vivir la vida porque sí, dejando pasar el tiempo. Alguien alguna vez dijo:
"Vive cada minuto como si fuera el último"... Si todos recordáramos esa frase a diario aprendería a vivir la vida intensamente, aprenderíamos a no posponer las emociones más lindas de la vida pensando que "si no es hoy será mañana"... tu tiempo es ahora, el futuro es incierto.
